Ideas para echarse al monte...
1. LA PEDRIZA
A poco más de media hora de Madrid, la Pedriza es un mundo aparte y quizás uno de los paisajes más espectaculares de la península.
Esta gran formación rocosa, donde nace el río Manzanares, se encuentra surcada por diversos cursos de agua que han formado un escenario único, en el que las rocas parecen mantenerse en precario equilibrio creando parajes de singular belleza.
Es un mundo de fantasía y esculturas gigantes, donde cada piedra nos recuerda algo y por eso todas tienen nombres que indican sus posibles semejanzas, así que tenemos el pájaro, las torres, el yelmo, el elefante, los amantes...
Desde los aparcamientos de Cantocochino salen la mayoría de las rutas. Las posibilidades de senderismo son múltiples, con todos los grados de dificultad.
El collado de las dehesillas es una de las vías más cómodas para acercarse al Yelmo, pico dominante de todo el macizo.
La pared de la Maliciosa y las cumbres de Cabezas de Hierro se asoman desafiantes tras el panorama granítico.
Al pie de la gran masa rocosa, el elegante castillo de Manzanares el Real, uno de los bonitos de España, pone un puntito histórico al asunto...
LA CABRERA
es un afloramiento granítico que podría considerarse una especie hermana menor de la Pedriza, con mucho encanto, pese a su reducido tamaño...
Un recorrido transversal puede empezar en Valdemanco y acabar en el Pico de la Miel, bajando de allí a la Cabrera, en unas pocas horas.
O bien una ruta circular desde Valdemanco rodeando el Cancho Gordo. Todo muy espectacular y con buitres.
2. PEÑALARA
El macizo de Peñalara supera los 2.400 mts. de altura y es la cima más elevada de la sierra de Guadarrama.
A sus pies hay varias lagunas de origen glaciar, entre ellas la bonita laguna grande de Peñalara, donde suelen dejarse ver las amigables cabras hispánicas.
En invierno está todo congelado y el imponente paisaje alcanza su máximo esplendor en los días soleados del deshielo primaveral...
La laguna de los pájaros, en la vertiente norte del macizo, es una de las más impresionantes, especialmente en invierno. El camino se puede hacer en unas 2 horas desde el puerto de Cotos, sin especial dificultad, excepto en invierno.
El parque nacional de la Sierra de Guadarrama, de reciente creación, abarca una gran extensión de pinares y picos, con una notable variedad de paisajes...
En invierno el puerto de Navacerrada se convierte en el destino preferido de los madrileños para disfrutar de la nieve, en un paisaje agreste y de gran belleza, a pesar de la masificación....
El circo de SIETE PICOS es una de las formaciones más características de la sierra, con sus 7 cumbres destacando claramente en la distancia...
Subir al monte Abantos desde la villa de Peguerinos es un cómodo paseo, dejando el coche en el último aparcamiento disponible.
Desde arriba hay estupendas vistas del monasterio del Escorial, y también de Cuelgamuros...

El monasterio del ESCORIAL, a los pies de la sierra madrileña, impresiona por sus dimensiones y por la austeridad de su diseño, al estilo de los gustos dominantes en la corte de Felipe II.

TORRELAGUNA, ya en el valle del Jarama, es una villa muy agradable con una potente iglesia gótica, que casi parece una catedral.
5. LOZOYA
El río Lozoya nace en las estribaciones de Peñalara y está embalsado por una sucesión de presas en casi toda su extensión. De estos embalses viene el agua corriente de Madrid, con fama de ser excelente.
En su corto recorrido hasta desembocar en el Jarama, el Lozoya pasa por interesantes parajes de la llamada "Sierra pobre" de Madrid...
El valle del Lozoya se extiende bajo la vertiente oriental de Peñalara donde se encuentra, en Rascafría, el Monasterio de el Paular, con sus valiosas obras de arte.
El monasterio ha sido objeto de una magnífica restauración, tras llevar abandonado más de un siglo.

El sagrario de la iglesia es una de las grandes obras del barroco español y el claustro del monasterio acoge la monumental serie cartujana, de Vicente Carducho.
Río abajo, la villa amurallada de Buitrago es un pintoresco conjunto a orillas del Lozoya.
El pintoresco paraje del Pontón de la Oliva merece una visita. Construida en el S. XIX, es la presa más antigua del curso del Lozoya y la última antes de la unión del Lozoya con el Jarama. En las paredes verticales del cañón hay varias vias de escalada.
















































