Litoral sur de Brasil

 


PARATY

Al sur de Río de Janeiro, la carretera Rio-Santos serpentea en dirección sur durante más de 500 km por una de las regiones más espectaculares de Brasil. La Serra do Mar preside y define el panorama. 

Se trata de una cadena montañosa que discurre paralela al litoral, propiciando el crecimiento de la Mata Atlántica, un ecosistema tropical de alta densidad, rico en flora y fauna.




Es una auténtica selva en altura, que impresiona por su aspecto salvaje e impenetrable. A los pies de la sierra, el accidentado litoral se recorta en interminables playas, islas y bahías, creando uno de los paisajes más hermosos del país.



ILHA GRANDE es la primera maravilla de esta región. La isla tiene un tamaño considerable, como su nombre indica, y es en su mayor parte una gran reserva natural de bosque tropical, que se ha mantenido casi intacta. 


En los últimos años, la isla se ha desarrollado considerablemente como destino turístico, si bien está muy preservada y no hay tráfico de vehículos, algo insólito en el litoral brasileño. 




Hay muchas playas, algunas tranquilas, mirando al continente, y otras de mar abierto, como Lopes Mendes, de fuerte oleaje, considerada una de las mejores playas de Brasil.









La central nuclear de Angra dos Reis, la única de Brasil, se aparece amenazante en medio del idílico panorama...






Siguiendo en dirección  sur llegamos a PARATY, la joya de la corona. Paraty es una bella ciudad histórica situada en una fantástica bahía, que constituye el centro urbano más significativo de la región.



 Paraty era una ciudad importante en tiempos coloniales, y tiene un hermoso casco histórico de corte barroco, reconocido como patrimonio mundial.







Numerosas fiestas y tradiciones populares se suceden durante el año, desde vistosas procesiones navales hasta el contundente carnaval. 












Los componentes del "bloco da lama" se rebozan en el barro medicinal de una playa vecina e invaden ruidosamente la ciudad, disfrazados de alegres salvajes.









 




Al sur de Paraty continúa el festival de fabulosas playas, impresionantes montañas y bahías salpicadas de pequeñas islas. La playa de Trindade, a pocos kilómetros de Paraty, es una de las más espectaculares. 












Trindade, antiguo reducto hippie, tiene hoy un aire tranquilo y alternativo, donde conviven apaciblemente pescadores y gente que huye de las grandes urbes.













LITORAL PAULISTA


La costa del Estado de Sao Paulo es un sinfín de paisajes impresionantes se suceden en cada curva de la carretera, mostrando todas las posibles combinaciones de mar, playa, montaña y selva.


La Serra do Mar, con su densa vegetación de Mata atlántica,  transcurre paralela a la costa, formando grandes paisajes de mar y montaña...










La llamativa silueta del "Montón de trigo" domina el paisaje playero de la región. Es una pequeña isla de forma piramidal, que quiere parecer un volcán, pero no cuela...


Ubatuba, Ilha Bela, Paúba, Maresías, Juqueí y Barra do Una son algunos ejemplos de esta interminable sinfonía de verde y azul.











Siguiendo hacia el sur llegamos a Santos, una populosa ciudad de más de 1 millón de habitantesSantos se encuentra ubicada en un bello paraje, a los pies de la Serra do Mar, en una amplia bahía rodeada de colinas con vegetación tropical.





La prosperidad de Santos se debe a la importancia de su enorme puerto, uno de los más importantes de Brasil, puerta de entrada y salida del comercio del Estado de Sao Paulo. 


El puerto de Santos fue también el punto de entrada de millones de emigrantes europeos y japoneses, que emigraron a Brasil durante el Siglo XX,  atraidos por las oportunidades del llamado país do futuro.



Como en toda ciudad brasileña, los contrastes sociales son acusados, y los edificios de lujo conviven con favelas y zonas de acusada pobreza, encaramadas en las colinas que rodean la ciudad.




Gonzaga, la playa de la ciudad, es un enorme arenal de varios km. de longitud, con un paseo marítimo con numerosos edificios de apartamentos, muchos de ellos curiosamente inclinados por efecto de la inestabilidad del suelo arenoso.




Gonzaga, como otras playas brasileñas, es un lugar de celebración de las ceremonias de homenaje a Iemanjá, la divinidad africana del agua. El culto a Iemanjá y a los Orixás fue traido por los africanos llevados a Brasil como esclavos.





Con el tiempo, para evitar persecuciones, los esclavos asimilaron la religión católica y desarrollaron el sincretismo, identificando sus deidades animistas con los santos cristianos. Iemanjá, una divinidad femenina, se ha identificado en la tradición sincretista con la Virgen María.






Por ello, en las fechas de celebración Mariana, 15 de Agosto y 8 de Diciembre, la playa de Santos se llena de devotos de Iemanjá, vestidos de blanco, que celebran diversos rituales de Umbanda y Candomblé, donde se producen intensos momentos de trance y comunicación psíquica con espíritus y entidades de esta tradición.





En las noches de Iemanjá, miles de personas acuden a la playa al atardecer. Al caer la noche, el aspecto moderno y occidental de la ciudad se transforma inesperadamente en un mundo exótico y ritual, de misteriosas resonancias africanas. 


La playa se llena de música, rituales de purificación, oráculos, ofrendas y ceremonias mágicas, en una fiesta multitudinaria, de sorprendente autenticidad y colorido.








Al sur de Santos el litoral se hace más lineal, con largas playas de dunas y lagunas. Entre Iguape y Cananeia se extiende la enorme playa de Ilha comprida, con más de 40 km. de longitud, que incluso se utiliza como carretera alternativa, en marea baja...





SUR

Siguiendo hacia el sur llegamos a Curitiba, capital de Paraná, una animada ciudad en cuyas cercanías hay interesantes parajes, como Vila Velha, un conjunto geológico con curiosas formaciones rocosas...









Desde Curitiba hasta la costa circula el Sierra Verde Express, un viejo tren reconvertido que atraviesa la sierra entre puentes y túneles, en un vertiginoso trayecto...





En el litoral paranaense se encuentra otra de las estrellas del litoral brasileño, la bucólica Ilha do Mel







Esta encantadora islita peatonal reúne variados paisajes y ecosistemas, magníficas playas y un ambiente relajado y alternativo...  











Siguiendo rumbo sur llegamos al estado de Santa Catarina, epicentro de la emigración alemana en Brasil. En la pintoresca BLUMENAU, de marcado carácter germánico, se celebra anualmente una animada Oktoberfest en versión tropical...











Farol de Santa Marta es un evocador pueblo costero del litoral catarinense, con un ambiente algo árido y con magnífcas playas...








Rio Grande do Sul es el estado más meridional de Brasil y aquí tenemos, entre otros lugares de interés,  las magníficas playas de Torres y la sierra exuberante de Canela...



















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