PARADOJAS DE LA CIUDAD ETERNA...
"....me asombré siempre de los hombres que viajan a Roma como si fueran, por ejemplo, a París o a Londres. Allí se encontraba el foco todavía ardiente y humeante de las viejas culturas, enraizado en la Edad media cristiana y occidental. Allí estaba todavía viva la antigüedad en toda su magnificencia e iniquidad...."
Carl Gustav Jung
"La Gran Belleza" no necesita presentación ni mayores explicaciones. Simplemente está todo ahí, dos mil años después, y todos los caminos conducen aquí, como bien saben los millones de turistas que pasan "Vacaciones en Roma".
Pero Roma todavía está llena de pequeñas sorpresas, lugares paradójicos e inesperados.
Como la Iglesia de San Ignacio de Loyola, en cuya cúpula se aprecia algo extraño, y es que al aproximarse se percibe que no hay cúpula, sino una excelente simulación en perspectiva que engaña a primera vista...
o la famosa Perspectiva de Borromini, donde el magistral efecto óptico producido por la reducción de tamaño de las columnas nos hace multiplicar por cuatro la estimación del tamaño real de la galería...
También hay iglesias gemelas, como las de la Piazza del Popolo, formando una curiosa simetría urbana...
El futurista "Coliseo cuadrado" forma parte de EUR, un enorme barrio construido por Mussolini para la Exposición Universal de 1.942, que no llegó a celebrarse, por razones obvias.
La galería Borghese es una de las grandes sorpresas romanas, y relativamente menos visitada que otras. Sus salas nos ofrecen una combinación inigualable de pintura y escultura, donde los frescos parecen tener relieve y todo el espacio parece convertirse en una obra de arte.
La central de Montemartini, reconvertida en museo de arte romano, es un espacio original donde las turbinas eléctricas y las esculturas clásicas forman un peculiar contraste...
También hay arte moderno, en el MACRO de Roma se encuentra una original "máquina de Dios", donde el creyente puede elegir su religión favorita...
Y todo el resto lleva dos mil años allí... No hace falta extenderse. Los antiguos edificios romanos se mantienen y con a la perfección con las grandes obras del renacimiento, que al fin y al cabo es una reedición de la estética imperial.
Los nombres son conocidos en todas partes: Coliseo, Foro, Panteón, Castillo de Santangelo, Piazza Navona, Fontana de Trevi...
y aún queda mucho por descubrir en el subsuelo.
VATICANO
La sorprendente visión a través del ojo de una cerradura en la Orden de los Caballeros de Malta nos descubre que hay incluso un pequeño estado independiente dentro del término municipal...
El Vaticano es el estado más pequeño del mundo, pero es un gigante del arte. Los museos vaticanos y la basílica de San Pedro dan fe de ello.
Casi en las afueras de la ciudad están los Castelli Romani, una zona de colinas donde se encuentran dos bonitos lagos volcánicos: El lago Albano y el lago Nemi. A orillas del lago albano está la papal localidad de Castelgandolfo, donde el sumo pontífice suele pasar los veranos...
Entre Roma y Nápoles se construyó la primera autopista de la historia: la Via Appia, diseñada para soportar gran densidad de tráfico y jalonada en todo el itinerario con ciudades, templos, albergues, restaurantes y todo tipo de servicios.
Diversos tramos de esta gran estructura han sido rehabilitados y es muy interesante recorrer el último tramo, de unos 15 km., entre Ciampino y las gigantescas Termas de Caracalla, en pleno centro de la ciudad eterna.