Sur de Corea del Sur


BUSAN



La segunda ciudad de Corea tiene un ambiente portuario y  marinero, con variadas  playas, islas y acantilados a lo largo de su extenso perímetro urbano. Salvando las distancias, recuerda un poco la orografía de Río o de Hong Kong. 





Son muchos kilómetros de una costa escarpada e irregular, jalonada por extensas playas y largos puentes sobre el mar. 





La playa de Songdo, con sus pasarelas y su peculiar teleférico marino, es una de las más pintorescas.










La playa de Haeundae, con un espléndido arenal y un pequeño puerto pesquero, es la "Copacabana" de Busan. 





Hacia el interior, Busan se extiende en un terreno accidentado, con auténticas montañas en pleno centro y estrechos valles donde se construye hasta el último metro disponible.  




La torre de Busan es un mirador muy céntrico que permite hacerse una idea de las dimensiones de la urbe. Las vistas son, para variar, magníficas.





También en pleno centro, el antiguo pueblecito de Gamcheon, incrustado entre colinas y rascacielos, se ha convertido un simpático barrio de casitas de colores, muy fotogénico.






 La ciudad transmite un dinamismo inusitado y  tiene una potente actividad cultural, con un famoso festival de cine y otras citas artísticas de relieve.








Los teléfonos de emergencia tienen un diseño peculiar...


Aunque también subsisten negocios más tradicionales, como el de relojero, o una ferretería móvil...





La lonja de Jagalchi es un gran mercado de seres marinos y un sorprendente recinto gastronómico donde se come todo lo que se mueva...  






El templo de Yongunggsa, en el extremo norte de la ciudad, es uno de los más visitados de Busan;  se encuentra directamente sobre el mar, en un sugestivo paraje de acantilados.  











GYEONGJU


Esta agradable ciudad del sur fue la capital del imperio Silla, que dominó la península coreana durante el primer milenio de nuestra era. Es una de las ciudades históricas más importantes de Corea, con un patrimonio histórico sorprendente.




Un insólito paisaje de suaves montículos ocupa los parques del centro de la ciudad. Se trata de las tumbas de los reyes Silla, que eran enterrados con sus pertenencias en esta especie de pirámides redondeadas.




Además quedan diversos vestigios históricos, de una gran variedad, entre los que destacan el observatorio astronómico más antiguo de Asia,  el estanque y los pabellones reales. También hay un interesante museo de arte antiguo. 



En el museo, un práctico garaje  sirve para guardar sillas de ruedas y cochecitos de bebés...


La arquitectura en madera es visible en  muchas casas tradicionales, así como en un hermoso puente cubierto.  







Por supuesto, no faltan los mercados...









GWANGJU 



Gwangju es una moderna ciudad del sur del país, con más de 1 millón y medio de habitantes. La ciudad tiene una fuerte tradición artística y es sede de una importante bienal de arte.




El Asian Cultural Center es el centro de gravedad de Gwangju.  Este  enorme recinto cultural alberga una variada programación de exposiciones, conciertos y performances.








La vida nocturna es animada, con abundante restauración y buenos locales de música  en directo, especialmente los fines de semana. 








Gwangju también es conocida por su activismo político y vivió en 1980 uno de los episodios más violentos de la corea moderna, en el que murieron varios cientos de manifestantes pro democracia. 

En su recuerdo, el reloj de la plaza principal suena todos los dias a las 5,18 de la tarde, hora en que ocurrieron los hechos. 




En las mismas afueras de la ciudad comienza el parque nacional de Mudeungsan, donde se encuentra el templo de Wonhyo sa.  El parque tiene un hermoso paisaje de suaves montañas y densos bosques, con los tonos que son de esperar en otoño.





 

La bienal de arte de Gwangju ha celebrado en 2024 su 15 edición.  La exposición principal se encuentra en un moderno pabellón de la bienal, construido al efecto, y la muestra también se extiende a  diversos espacios de la ciudad


Se caracteriza por la presentación de obras vanguardistas en diversos soportes, con un nivel de calidad bastante alto.  Destaca la presencia de artistas coreanos y de otros países de Asia.  




























En suma, la bienal es una excelente excusa para acercarse a esta simpática ciudad coreana, donde el arte aparece hasta en los vagones del metro...












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