Entre Génova y Pisa se suceden algunos de los lugares más espectaculares del bel paese.
Hay ciudades históricas de gran importancia, pueblecitos encantados colgados del acantilado y cordilleras de mármol de Carrara...
Ni que decir tiene que estas maravillas no pasan en absoluto desapercibidas a las masas de turistas, por lo que conviene buscar épocas y horarios adecuados.
GENOVA
Génova, capital de la Liguria, tiene un peso histórico extraordinario. La antigua república genovesa competía con Venecia por el dominio del mare nostrum, tenía ciudades fortificadas por todo el Mediterráneo y hasta un barrio entero de Estambul era genovés (Gálata).
Hoy es el principal puerto de Italia, y una próspera ciudad con un nivel económico y cultural considerable. Como era de esperar, su gran patrimonio arquitectónico se corresponde con su importancia histórica.
En torno al puerto, el centro histórico de Génova es realmente atractivo, con muchos edificios interesantes y algo de caos portuario...
La encantadora región de las CINQUE TERRE, en el litoral genovés, se compone de cinco preciosas villas de trazado medieval que se cuelgan de un litoral escarpado y de díficil acceso, excepto por un práctico tren que conecta las villas en pocos minutos.
También hay caminos costeros para hacer magníficos recorridos a pie, al borde del acantilado.
La afluencia turística puede ser agobiante en verano, por lo que se recomienda mucho ir fuera de temporada.
Manarola es la segunda de las villas, viniendo del sur, y es quizá la más espectacular de las cinco, con su colorido casco urbano apiñado en un peñón casi vertical...
Vernazza es la cuarta villa y también es impactante, por su ubicación casi inverosímil. Aquí el tren casi se mete en la iglesia...
ALPES APUANOS
Este sugestivo conjunto montañoso está situado en el extremo norte de los Apeninos, entre Toscana y Liguria...
Los Apuanos tienen un paisaje abrupto y vertical, y sus empinadas montañas están en parte formadas por un valioso mineral...
Cerca de Carrara se encuentran las impresionantes canteras donde se obtiene, desde hace más de dos milenios, el más preciado mármol del planeta.
Con este preciado material se han construido durante siglos innumerables palacios, templos y obras de arte, así como cuartos de baño...
Hay montañas enteras cortadas a rebanadas. En las canteras hay cortes datados de época romana, otros de época renacentista, otros más modernos... y el trabajo continúa.
Las canteras tienen un aire a la vez grandioso y un poco trágico, por el destrozo ambiental, y recuerdan por momentos las enormes ruinas de una civilización perdida...
los Apuanos tienen otros parajes de gran belleza natural, como el Monte Procinto, un enorme pedrusco vertical que parece cortado a máquina...
o el anfiteatro natural situado bajo el gran arco del Monte Forato, sonde se asientan simpáticos pueblecitos...
como el fotogénico Ponte della dogana...
o el encantador paraje de Isola Santa, un pueblecito medieval abandonado a la orilla de un lago...
El parque nacional del Apenino Tosco, hacia el interior, es otro de los grandes espacios naturales de la gran cordillera italiana.
La popular Piedra de Bismantova es un peculiar monolito rocoso visible a km. de distancia, citada por Dante en la Divina Comedia.
PISA y LUCCA son grandes ciudades históricas, aunque medianas en tamaño. Ambas tienen magníficos monumentos y encantadores centros urbanos, y parecen mostrar cierta "inclinación" por las grandes iglesias románicas.
PISA tiene un animado ambiente estudiantil y un atractivo centro urbano, pero aquí todo gira en torno a la famosa inclinación, que convierte a su espléndida catedral románica en uno de los monumentos más famosos del planeta...
LUCCA no tiene desperdicio. Magníficas iglesias románicas, animadas plazas, árboles en lo alto de torres y sólidas murallas para pasear...